Matriz de riesgos: la herramienta clave para optimizar la evaluación de riesgos
Hace unos días leía un informe realizado a fecha 20 de abril de 2022 por CCOO en el que se realiza un análisis de las estadísticas de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales en España en 2021.
Allí puedes encontrar una comparativa de los datos de accidentes mortales, accidentes con baja y accidentes sin baja por sector, actividad, comunidad autónoma, sexo, años de experiencia, etc. Las gráficas y datos allí mostrados favorecen un análisis detallado y profundo pero lo que más me impactó fue el apartado de accidentes de trabajo y existencia de evaluación de riesgos.
Como vemos en esta gráfica incluida en el informe de referencia, desde 2012 aproximadamente un tercio de los accidentes con baja no disponían de la evaluación de riesgos correspondiente.
Es difícil comprender para los que nos dedicamos a la prevención de riesgos laborales que, transcurridos 26 años desde que entró en vigor la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, todavía haya empresas que no realizan este tipo de evaluaciones.
¿Cuál puede ser la causa? No se conoce cuál es la mayoritaria, pero sí podemos citar: falta de asunción de modalidad preventiva, falta de información o formación preventiva.
En nuestro artículo te dábamos una de las 4 razones por las que debías contar con una evaluación de riesgos: Conocer los riesgos que incluyen todos los lugares de trabajo de tu empresa y poder actuar desde el origen para evitar pérdidas económicas no planificadas (accidentes laborales). Y para poder evitar esos accidentes y actuar de forma preventiva es necesario saber cómo evaluar los riesgos y como priorizarlos.
Es aquí donde la herramienta clave, la matriz de riesgos, cobra relevancia. Veamos con más detalle de qué se trata.
¿Qué es la matriz de riesgos y para qué sirve?
La matriz de riesgos laborales es una herramienta de gestión que permite determinar, de forma objetiva, cuáles son los riesgos prioritarios para la seguridad y salud de los trabajadores que tiene una empresa.
Analiza lo que denominamos nivel de riesgo presente en los lugares de trabajo comparando por nivel de riesgo las diferentes tareas. De este modo, se podrán priorizar acciones preventivas que nos permitirán eliminar o disminuir los riesgos asociados y, por tanto, los accidentes laborales. Es decir, una matriz de evaluación de riesgos permite construir colectivamente las estrategias y tácticas preventivas.
Características de una matriz de riesgos, ¿qué debe contener?
Existen múltiples ejemplos de matriz de riesgos ya que, tanto los servicios de prevención ajenos como los servicios de prevención propios, han creado su propia metodología.
Sea cuál sea la metodología que sigas, te recomiendo que sea fácil de entender y cumplimentar y más, teniendo en cuenta, que su uso es continuado. Cada vez que tengas un nuevo puesto de trabajo, que implementéis una nueva tarea o que cambiéis parte del proceso o forma de proceder, identificarás unos riesgos y, a continuación, tendrás que valorarlos con la matriz de análisis de riesgos.
En la NTP 330 se describe un sistema simplificado de evaluación de riesgos de accidente.
Con la matriz de riesgos laborales vamos a determinar lo que se denomina nivel de riesgo y, para ello, necesitamos contar con dos parámetros básicos:
Probabilidad
La probabilidad es la posibilidad de materialización de un riesgo analizado. En el caso que nos ocupa, se trata de una probabilidad teórica si bien estará basada en datos cualitativos o cuantitativos de la tarea a evaluar y valorar.
En este sentido, se recomienda diseñar la matriz de riesgos de una empresa partiendo de una escala de 3 o 5 posibilidades, siendo el primero de los escenarios el más lejano en la posibilidad de materialización del riesgo y el tercero o quinto el más cercano.
De cara a simplificar la valoración del riesgo, partiremos de una escala de 3 (haciendo referencia al método del INSHT):
Probabilidad baja: el riesgo puede materializarse raras veces.
Probabilidad media: el riesgo se podría materializar algunas.
Probabilidad alta: el daño ocurrirá siempre o casi siempre.
Como vemos, a la hora de elaborar una matriz de riesgos es fundamental conocer tanto la tarea y su repetitividad como llevar a cabo la valoración de la probabilidad con el responsable de la zona y la persona que ejecuta ese trabajo.
En la gran mayoría de empresas, se asocia la probabilidad del riesgo teniendo en consideración factores tales como:
- Las medidas de control ya implantadas
- La frecuencia con la que se repite la tarea
- Los requisitos legales
- El tipo de trabajador que desarrolla la actividad (personas especialmente sensibles)
A medida que avanza y mejora la actividad preventiva de una empresa, se podría plantear la posibilidad de aumentar la matriz de evaluación de riesgos a una escala de 5 posibilidades ya que se dispondrá de un mayor detalle de los datos anteriormente descritos, así como se habrán eliminado o minimizado un número importante de riesgos.
Severidad del daño
La severidad de un riesgo es el valor asignado al daño más probable que produciría si se materializase y para determinar este potencial, debemos de tener en cuenta:
- Las partes del cuerpo que se verán afectadas
- La naturaleza del daño, graduándolo desde ligeramente dañino a extremadamente dañino.
Severidad baja: daños superficiales (pequeños cortes y magulladuras); irritación de los ojos, molestias e irritación (dolor de cabeza, disconfort), lesiones previsiblemente sin baja o con baja inferior a 10 días naturales.
Severidad media: quemaduras, conmociones, torceduras importantes, fracturas, amputaciones menos graves (dedos), lesiones múltiples; sordera, dermatitis, asma, trastornos músculo-esqueléticos, intoxicaciones previsiblemente no mortales, enfermedades que lleven a incapacidades menores. Lesiones con baja prevista en un intervalo superior a los 10 días.
Severidad alta: amputaciones muy graves (manos, brazos, ojos); cáncer y otras enfermedades crónicas que acorten severamente la vida, lesiones muy graves ocurridas a varias o a muchas personas y lesiones mortales.
¿Cómo hacer una matriz de riesgos?
Una vez tenemos identificados todos los riesgos asociados a un puesto de trabajo y sus tareas asociadas, iremos a lo que se denomina valorar el nivel de riesgo a través de la matriz de riesgos.
Para clasificarlo en nivel de riesgo bajo, medio o alto, necesitaremos haber determinado los parámetros de probabilidad y severidad descritos en el apartado anterior.
Siguiendo con el ejemplo anteriormente descrito de 3 niveles de probabilidad (en columna) y 3 niveles de severidad (en fila), la matriz de análisis de riesgos quedaría:
Así pues, tendremos un nivel de riesgo muy alto cuando la probabilidad de que ocurra es alta y las consecuencias de que se materialice son de una severidad alta.
Por ejemplo, podríamos tener el caso de una actividad repetitiva que se realiza en altura y no dispone de medidas preventivas de eliminación o disminución del riesgo.
Con los niveles de riesgo valorados con la ayuda de la tabla anterior, podremos priorizar las acciones preventivas a llevar a cabo en la empresa, acorde con:
Ejemplo de una matriz de riesgos
Tal y como comentábamos al principio de este artículo, son múltiples y diversas los ejemplos de matriz de riesgos que puedes encontrarte en la bibliografía o en tu propia empresa.
La matriz de riesgos 3 x 3 es una de las más extendidas a nivel nacional seguida de una matriz 5 x 5 en donde tanto la probabilidad como la severidad son más precisas.
Yendo más allá en el análisis y valoración, hay empresas que le dan un valor numérico tanto a la probabilidad como a la severidad y su multiplicación nos da el nivel de riesgo sobre el que actuar.
Parece evidente que, sea cual sea la metodología a utilizar, la matriz de riesgo es la herramienta que necesitas para establecer tu estrategia preventiva y reducir los accidentes laborales.
Una vez hayas determinado el nivel de riesgo de todos los puestos de trabajo e identificado el plazo de ejecución, deberás generar un plan de acción. Trabajar conjuntamente con todo el equipo directivo y determinar qué recursos de tiempo, personas y económicos necesitáis os llevarán a reducir los riesgos y evitar daños a las personas.